Desde el día en que probé este plato en casa de mi amiga Ángela, no me lo he quitado de la cabeza. Qué  ganas de volver a degustarlo! Así  es que hoy, dicho y hecho.

Esta receta es muy parecida al Solomillo de cerdo a la mostaza, pero el corte de la carne es distinto y cambian algunos ingredientes.

Empezaremos por cortar el solomillo de cerdo en tacos gruesos. Los salpimentaremos al gusto.  En una sartén grande, con un poco de aceite, los marcaremos a fuego fuerte. A mí  me gusta crujiente por fuera y poco hecho por dentro. Cada cual que lo prepare a su gusto. Una vez hecho al punto deseado, lo reservaremos.

A continuación, cortaremos a cebolla en juliana. Recomiendo utilizar la cebolla de Fuentes, por su sabor dulce.

En la misma sartén que hemos utilizado para marcar el solomillo, con el aceite sobrante que tendrá  el sabor de la carne, pondremos a pochar la cebolla, a fuego medio. Cuando veamos que la cebolla ha quedado transparente, añadiremos un par de cucharadas de azúcar. Removeremos bien y la dejaremos en el fuego hasta que caramelice. En ese momento, podemos añadir, si queremos, un chorrito de Pedro Ximenez. En un par de minutos se habrá evaporado el alcohol.

Una vez tengamos lista la cebolla, añadiremos la crema de leche. A fuego medio. Removeremos para que ligue bien la salsa.

Añadiremos la mostaza. Al gusto de cada cual. Podemos ir echando poco a poco hasta conseguir el punto que queremos. Seguiremos removiendo.

Cuando la salsa esté  hecha, añadiremos el solomillo que teníamos reservado. Removeremos durante un par de minutos.

Serviremos caliente.

Ángela, cuando quieras me vuelves a invitar!

 Ingredientes para 1 solomillo de cerdo

1 solomillo de cerdo

2 cebollas grandes de Fuentes

200 ml. de crema de leche

Mostaza

Aceite

2 cucharadas de azúcar

Sal

Pimienta

Pedro Ximenez (opcional)