Ensalada de espinacas con champiñones y queso parmesano.
Esta ensalada combina dos alimentos tan sabrosos como completos nutricionalmente hablando.
La primera vez que probé los champiñones crudos quedé muy sorprendida. Gratamente sorprendida, he de decir. Y desde entonces, los incorporo a las ensaladas cada vez que los tengo a mano. Estas setas son ricas en potasio (que ayuda a eliminar líquidos), fósforo (que ayuda reducir el estrés) y selenio (importante antioxidante). Además, son ricas en vitamina B, en concreto, vitamina B2 y B3.
Por su parte, las espinacas es uno de los vegetales que contiene más proteínas. Son ricas en minerales, tales como calcio, hierro, potasio, magnesio, manganeso y fósforo. Además, contiene vitaminas A, B, C y E.
Su elaboración requiere de poca explicación. Basta con ver la fotografía.
Simplemente, dispondremos los brotes de espinacas (que, para mayor comodidad ya vienen embolsados y limpios), laminaremos los champiñones y los añadiremos, y por último, cortaremos finas láminas de queso parmesano, que incorporaremos a la ensalada. Salaremos, regaremos con aceite de oliva virgen extra y la crema balsámica que más nos guste. Fin de la preparación.
Está claro, pues, que en tres minutos, podemos prepararnos una ensalada sana, sabrosa y completa.