Me gustan las cremas. Todas las cremas. Frías o calientes. De verduras u hortalizas. Y una de mis preferidas es la crema de champiñones.

Tal vez no sea la receta tradicional, pero es como yo la preparo y como a mí me gusta.

Cortaremos la cebolla en juliana. En una cazuela honda pondremos un poco de aceite y, a fuego lento, iremos pochando la cebolla. Mientras tanto, pelaremos las patatas y las cortaremos a trozos no muy grandes. Las incorporaremos a la cazuela. Removeremos bien. A continuación, añadiremos los champiñones enteros, que habremos limpiado previamente. Salpimentaremos y seguiremos removiendo.
Añadiremos un vaso de vino de guisar y subiremos el fuego. Dejaremos la cazuela destapada para que se evapore el alcohol del vino durante unos 5 minutos. Pasado este tiempo, añadiremos un vaso de agua (o de caldo vegetal) y taparemos la cazuela. Los champiñones soltarán bastante agua. Dejaremos que hierva durante unos 15 minutos. Pasado este tiempo, comprobaremos que la patata está totalmente cocida.

Reservaremos 4 champiñones enteros para adornar el plato.

Trituraremos la sopa de champiñones, patata y cebolla con la batidora hasta obtener una crema fina. La crema ya estará lista, pero a mi me gusta añadir, ahora, un poco de crema de leche para suavizar el sabor. Añadiremos la nata líquida y removeremos para que se integre bien. Adornaremos con los champiñones que habíamos reservado, que laminaremos. La serviremos caliente.

Ingredientes para 4 personas
600 grs. de champiñones enteros
1 cebolla grande dulce
2 patatas medianas
1 vaso de vino de guisar
1 vaso de agua
Sal
Aceite
Pimienta blanca en polvo
200 ml. de crema de leche