Siempre me gustó la combinación del salmón y el aguacate. Alimentos grasos ambos pero muy saludables. El aguacate, a pesar de ser calórico, contiene gran variedad de nutrientes, como la vitamina A, B, C, E y minerales como el hierro, fósforo, magnesio y potasio. Y el salmón, en mi opinión, el rey de los pescados azules, me gusta de cualquier manera, al vapor, crudo, marinado, ahumado…. Así que nada mejor que combinarlos en una sencilla ensalada. Nunca fui muy amiga de las ensaladas. Me parecían aburridas, insípidas. Pero introduciendo algunos de mis alimentos favoritos, una triste ensalada podía convertirse en un plato apetitoso.

Esta ensalada, como suele ocurrir con todas, no tiene ningún secreto. Pero si queremos que sea original, simplemente hemos de darle un toque especial a la presentación. En este caso, presentamos la ensalada por pisos y colores y este sencillo truco hace que, además de sabrosa, sea bonita.

En primer lugar troceamos el aguacate en trozos pequeños. Lo reservamos con unas gotas de limón para que no se ennegrezca. A continuación, cortamos los tomatitos cherry en rodajas. Personalmente, prefiero los tomates cherry tipo pera, ya que son más sabrosos. Lo reservamos. Cortamos el salmón ahumado en tiras y lo reservamos.

Para montar la ensalada utilizaremos un aro metálico. En la base colocaremos el aguacate, a continuación el tomate cherry, encima la ensalada mezclum y por último las tiras de salmón ahumado.

Prepararemos la vinagreta mezclando aceite virgen de oliva extra, vinagre, sal y el zumo de un limón o de una lima, según el gusto de cada cual.

Ingredientes para 4 personas

1 Aguacate
1 bandeja de tomates cherry
Ensalada mezclum
1 paquete de salmón ahumado

Para la vinagreta:
Aceite
Vinagre
Sal
Zumo de un limón o lima