La judía Azuki, también conocida como frijol o soja roja es originaria del Himalaya. De ahí pasó a China y a Japón, donde es muy consumida.

Este tipo de judías son más fáciles de digerir que el resto de legumbres y posee grandes cualidades nutricionales. Su aporte de fibra es muy alto y contienen gran cantidad de vitaminas del grupo B (B1, B2 y B7), además de minerales como hierro, fósforo, calcio,magnesio y zinc.

Hoy las he cocinado con pies de cerdo, un plato de cuchara contundente, de esos para tomar de vez en cuando.

Como siempre que vamos a cocinar legumbres, las pondremos a remojo en agua fría durante 6 u 8 horas. Transcurrido este tiempo, las pasaremos a una olla, cubiertas de agua, con 2 o 3 hojas de laurel y una cebolla grande entera (sólo la pelaremos). Encenderemos el fuego y dejaremos hervir las judías hasta que estén tiernas (1,5 horas aproximadamente). Intentaremos que el hervor sea suave, para que se cuezan pero no se rompan. Una vez cocidas, apagaremos el fuego y reservaremos.

Extraeremos la cebolla utilizada para hervir las judías y la colocaremos en el vaso de la batidora, junto con dos tomates pequeños muy maduros (yo utilizo tomates de colgar). Los trituraremos y reservaremos.

Vamos a por los pies de cerdo. Yo los compro ya cocidos, por un tema de comodidad. Antes de incorporarlos a nuestro guiso, conviene introducirlos en el horno, suave, a unos 160 ºC, durante 15 minutos, aproximadamente, para que queden más gelatinosos y sea más fácil deshuesarlos.

Pasado este tiempo, con ayuda de un cuchillo pequeño y muy afilado, deshuesaremos los pies de cerdo y los cortaremos a trocitos, de un tamaño idóneo para poder tomar el guiso simplemente con cuchara sin necesidad de cortar.

El siguiente paso será coger una sartén grande, poner un poco de aceite de oliva virgen extra y ponerlo a calentar. Añadiremos la cebolla y tomates triturados que habíamos reservado y haremos un sofrito. Estará listo cuando haya perdido el agua, reducido considerablemente su volumen y haya cogido un tono tirando a marrón.

Una vez tengamos el sofrito, incorporaremos a la sartén los pies de cerdo troceados que habíamos reservado. Removeremos. Añadiremos un par de cucharaditas de postre de pasta de pimiento choricero y seguiremos removiendo un par de minutos a fuego medio.

Finalmente, incorporaremos las judías con un poquito del caldo de cocción. Moveremos ligeramente la sartén , salaremos al gusto y dejaremos a fuego medio durante cinco minutos más.

Dejaremos reposar y serviremos caliente.

Ingredientes para cuatro personas 

4 1/2 pies de cerdo cocidos

400 gr de judías Azuki secas

1 cebolla grande

2 tomates pequeños muy maduros

3 hojas de laurel

2 cucharaditas de pasta de pimiento choricero

Aceite de oliva virgen extra

Sal